Gaspar Noé y su Rush Visual en Enter The Void.
Te has preguntado, ¿cómo se ve Tokyo desde arriba?
De aparecer segunda en el Top de Edward Wright (Scott Pilgrim vs. The World) de películas subestimadas de 2010, Enter The Void (ETV) ha pasado a influenciar, con su particular fotografía y luces estroboscópicas, videos como All The Lights de Kanye West (2011)
De aparecer segunda en el Top de Edward Wright (Scott Pilgrim vs. The World) de películas subestimadas de 2010, Enter The Void (ETV) ha pasado a influenciar, con su particular fotografía y luces estroboscópicas, videos como All The Lights de Kanye West (2011)
Gaspar Noé construye en su film soñado otra categoría de escenas (transiciones) de culto.
¿Cómo olvidar la violación en tiempo real de Mónica Bellucci que nos presentó Noé en la ultraviolenta Irreversible (2003)?
En ETV Noé se interna en el sobreexplotado tema de las experiencias post mortem, pero esta vez, además de luces al final del túnel, presenta su versión de la última experiencia del ser humano. Inspirado en el Libro Tibetano de los Muertos y la vida del drug dealer/junkie Oscar (Nathaniel Brown) quien hace vida en Japón junto a Linda, su hermana (Paz de La Huerta) exhibe una aproximación fiel de lo que clásicamente sucede luego de morir.
ETV logra que el espectador flote a través de Tokyo sin barreras físicas ni humanas.
Oscar se convierte en un ente etéreo y silencioso que es capaz de llegar hasta la conciencia de sus personas cercanas, ir del pasado al futuro y lograr ver lo que ellos ven. Cada escena sostiene esa sensación de extrema realidad fruto de la meticulosidad y el trabajo al detalle con el que se obsesiona Noé en sus producciones. En esta ocasión vemos una nueva gama de efectos bien logrados, ángulos de cámara imposibles y transiciones irracionales acompañadas por una edición pulcra durante las dos horas y media de película.
La falsa sensación del tiempo real.
En algún punto obsesivo y en otro recursivo, Noé pasa a usar en exceso lo que el algún momento fue innovador en el cine. En ETV explota su sello particular de escenas en tiempo real, donde el espectador acompaña a los personajes en largas caminatas, conversaciones bien estructuradas con pausas y silencios que permiten captar en detalle todo lo que ofrece un ambiente tan cargado de elementos visuales como lo es Tokyo.
La veracidad es la clave:
Investigación, testimonio o propias experiencias, todas y cada una se completan en diálogos acertados, interesantes y con un halo de veracidad irrefutable donde Alex (Cyril Roy) es el personaje que le da ese toque de credibilidad a la película, que puede encontrar tantos detractores como seguidores en el mundo de las sustancias psicotrópicas.
La recreación de los efectos alucinantes y secundarios de las drogas (efecto kaleidoscopio, intensidad en las luces, objetos borrosos o muy definidos, euforia y/o paranoia) en este film es, hasta ahora, una de las representaciones más acertadas y psicodélicas que ha visto el cine. Se nota el trabajo arduo en representar algo tan personal, aleatorio e imposible de ser puesto en escena fielmente. Esta nueva visión enfocada al detalle también se percibe en la representación de morir y “flotar” alrededor, viendo los sucesos que se desprenden luego este evento.
Las escenas aleatorias se aproximan a los recuerdos que descansan en nuestra mente y surgen de vez en cuando en algún sueño, o cuando una palabra, sonido o imagen clave es llamada. Temas secundarios completan los flashbacks/flashforwards del viaje de Oscar, como del incesto, el aborto y la introducción sexual a temprana edad donde Noé utiliza una violenta dualidad entre ciertas imágenes y tomas.
Veredicto.
Un guión con decenas de páginas sin dialogo describen el recorrido exacto de la cámara con distintas velocidades para cambiar la frecuencia y la intensidad de la película con escena tras escena de los recuerdos del protagonista. El uso de múltiples sets, y la duda ante la cantidad de efectos digitales usados hacen de ETV una joya en el apartado técnico. Aun así, su longitud excesiva obliga a verla en dos o más partes para mantener el interés y no dejar a un lado los detalles importantes de un argumento que inyectó madurez a esta producción de Gaspar Noé.
Enter The Void (2009)
Director: Gaspar Noé
Cast: Nathaniel Brown, Paz de la Huerta, Cyril Roy
Similar: Irreversible, Black Swan, Never Let Me Go.
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